PORRA DE MAYO 2004
TEMA: MINI CON ÁNGEL Y ARMADILLO
Minificciones que han obtenido el mayor número de apuestas entre los porristas
Primer puesto
"Ensoñación para piano y orquesta”
de Madame Lafaitte
de Madame Lafaitte
Cuando el armadillo despertó, su ángel de la guarda estaba allí: Llevaba un hilo por ala en el costado, temblor en la mirada y un algo, no sé qué, de dolor a despedida a cuestas.
El animal contempló desconsolado la triste escena y se dispuso de nuevo a dormir: —Mañana será otro día —dijo, enroscándose el alma.
El animal contempló desconsolado la triste escena y se dispuso de nuevo a dormir: —Mañana será otro día —dijo, enroscándose el alma.
Segundo puesto
"Penitencia”
de Arconte
de Arconte
Al alba, el beso solar arranca un crujido del caparazón del armadillo, la coraza se abre como una flor y los pétalos correosos se despliegan despidiendo gotas de rocío. Con lentitud, las escamas se afinan hasta convertirse en plumas y las garras pierden filo y fuerza. De los ojillos casi superfluos del animal brota una luz que parece volverse sobre si misma y adquirir un lustre atemporal.
Completada la metamorfosis, el ángel se eleva a los cielos con la esperanza de haber expiado su pecado de soberbia.
“Divertimento infantil (II)”
de Señorita Macutta
de Señorita Macutta
Querella Querube, cerúlea cenicienta de pálida piel, pastorea su piara por el canto acanalado de las nubes. Castigada —por malvada, por malévola, por mala— a cuidar los armadillos celestiales, —¡condenados animales!— se pasea maldiciendo a los quirquinchos —¡feos bichos!— que diosito le encargó.
Triscando tribulaciones se le atrabancan las alas con un rabito de nube y, enredada entre los nimbos, se hace un lío la Querube con las plumas, con el aura y la piara.
—¡Castigo de Dios, Querella —se carcajean las bestias— por querer de un armadillo hacer peinetas!
Desolada, desalada, colorada de la cara y de la rabia, plañe con plantos las penas, el mal paso y la vergüenza de verse ángela caída cuando nació querubina. Más de pronto, alebrestada, prestamente se levanta: alza la cara, sorbe las lágrimas, se amarra la falda y canta:
Triscando tribulaciones se le atrabancan las alas con un rabito de nube y, enredada entre los nimbos, se hace un lío la Querube con las plumas, con el aura y la piara.
—¡Castigo de Dios, Querella —se carcajean las bestias— por querer de un armadillo hacer peinetas!
Desolada, desalada, colorada de la cara y de la rabia, plañe con plantos las penas, el mal paso y la vergüenza de verse ángela caída cuando nació querubina. Más de pronto, alebrestada, prestamente se levanta: alza la cara, sorbe las lágrimas, se amarra la falda y canta:
'Nadie me quiere, todos me odian
mejor pateo un armadillo:
Le quiebro la conchita,
le enredo los anillos,
¡Qué rico es patear un armadillo!'
mejor pateo un armadillo:
Le quiebro la conchita,
le enredo los anillos,
¡Qué rico es patear un armadillo!'
Con el canto de Querella tiembla el cielo. En la tierra, contra el suelo, reventadas las bolitas de quirquincho dizque parecen granizo.
Tercer puesto
"Ángeles del asfalto”
de Comandante Kila
de Comandante Kila
Cuando la ciudad dormita surgen de las alcantarillas niños de cara sucia. Ellos iluminan, con el ir y venir de sus alas blanquísimas, a los armadillos que avanzamos a tientas por nuestras pesadillas.
“Pasión sin límites”
de Lancelot
de Lancelot
El ángel y el armadillo se amaron toda la noche. El exceso de alcohol ahogó en sus espíritus todo prejuicio sexual, y sucumbieron indefensos ante la avalancha de deseos que se precipitaba en sus cuerpos; alas y caparazón quedaron en la alfombra, y los gemidos de placer ácido — casi doloroso — se sofocaban en la almohada mientras sus incompatibles genitales recorrían caminos prohibidos.
Cuando la luz de la mañana los despertó, descubrieron con asco y espanto la aberración que habían cometido. Desde entonces, Pedro y José, ya no beben en carnaval.
Cuando la luz de la mañana los despertó, descubrieron con asco y espanto la aberración que habían cometido. Desde entonces, Pedro y José, ya no beben en carnaval.
Ganador de la porra: Boris
Concurso 56. Mayo - 2004
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