123. Diciembre - 2009

CONCURSO CXXIII  DICIEMBRE – 2009

JURADO: LA PORRA DE FICTICIA

TEMA: TEMAS NAVIDEÑOS

Navidad

GANADOR CON CUATRO VOTOS:

FERJAAD

Los carcosémidos

El único remedio era aplastarlos uno a uno, como a chinches; pero además de su resistencia a los químicos desarrollaron técnicas miméticas y un exoesqueleto inexpugnable y venenoso. Ocasiones había de encontrarlos simulando una palabra cualquiera, con especial preferencia por las de cuatro letras. Si sorprendíamos a uno entre las páginas de un libro, saltaba de inmediato a los estantes y se deslizaba en otro volumen antes de permitirnos cualquier maniobra insecticida. Cuando su virulencia llegó al máximo, infectaron también el habla. En las calles las conversaciones se volvieron incomprensibles. Al final los diccionarios parecían museos de historia natural: las palabras como animales disecados, cascarones absurdos, bloques fríos de letras sin pasado. Nos descubrimos instalados en una prehistoria de gruñidos y palabras huecas donde los carcosémidos se hartaron de significados hasta, literalmente, reventar.

SEGUNDO LUGAR CON TRES VOTOS:

LADY MACBETH - Elisa de Armas

Mestizajes

Las Navidades son un tormento. Él no soporta la humedad de la casa de los padres de su amada, ni su luz azulada y fría, ni el inevitable ceviche en Nochebuena. Ella odia el menú vegetariano de sus suegros y el repiqueteo que producen sus cuñados al bailar sobre la tarima la noche de fin de año. Las dos familias los contemplan con recelo, ¿qué híbridos monstruosos no engendrará esta unión contra natura, de centauro y sirena?

EL POETA ZURDO

Kafka tras el cristal

El público, siempre paciente en los trámites burocráticos, apenas ha notado que es un escarabajo quien atiende al otro lado de la ventanilla. No les sorprende que el coleóptero sostenga una póliza con sus patitas delanteras; tampoco que lance volutas de humo desde la cazoleta de su pipa, aunque les desconcierta, eso sí, el hecho de que lo haga en un edificio público donde, según el artículo 3654/67/4352cd/Bis, está terminantemente prohibido fumar.

HOMLESS

Navidades negras

Aterido de frío, Santa Claus encendió la chimenea por la cual —en ese mismo instante, dichosas casualidades— los tres Reyes Magos descendían para dejar montañas de regalos a Jaimito. De aquel encuentro que jamás llegó a producirse, sólo quedó olor a quemado, pavesas reales y, sobre todo, restos de pintura negra, muestra manifiesta de que Baltasar, un año más, era un maldito blanco con la cara pintada de negro.

TERCER SITIO CON DOS VOTOS:

COCAINA

La noche de San Juan

De su vejiga llegaba el dolor en oleadas, cada vez más fuertes. Ella pensó que el antibiótico empezaría a aliviarla durante la noche y se dispuso a dormir.

Un ruido la distrajo, un chapoteo en su vulva. El sonido se incrementó, más y más fuerte mientras el dolor se deslizaba hacia fuera, rumbo a su entrepierna. Un cántico se abrió paso mientras ella, aterrorizada, aferrada a las mantas de la cama, escuchaba un aullido.

Un rosado bulto, con manchas marrones, subió por sus piernas dejando a su paso un rastro de sangre. Cuando las ratas pequeñitas empezaron a salir de su nido, acercándose a su boca, su mente se quebró.

La encontraron cantando canciones de cuna al amanecer.

LOLA CACEROLA

El Bello Durmiente

El Dinosaurio estaba nada más mire y mire, esperando a ver a qué horas se despertaba el Dormilón, o de plano que empezara a apestar para podérselo comer, pues era como las toninas.

LOLA CACEROLA

Así pasaron veinte años

Cuando el Bello Durmiente despertó resultó que el dinosaurio que lo había estado espera y espera, había muerto tres años antes.

WELLY

Noche de Martinis

Distinguidos microorganismos de la industria alimentaria coincidieron en un cóctel; dilucidaron sobre la parquedad del pan, criticaron el minimalismo de los champiñones y con malas palabras se expresaron del vinagre. Pero eso sí, todos alabaron la delicadeza, la elegancia, el color y la calidez de la aceituna, que amablemente los albergaba en la copa.