132. Septiembre - 2010

CONCURSO CXXXII  SEPTIEMBRE – 2010

JURADO: MARIO CAPASSO

TEMA: EL PASO DEL TIEMPO

El paso del tiempo

GANADORAS SIN ORDEN ALGUNO:

EFECTO MARIPOSA - Rubén Pesquera Roa

Botánica

Se muere de aburrimiento, aunque sólo es un decir, no se muere. Hace trescientos años que languidece entre esa duermevela que es el vivir tanto tiempo. Pasa temporadas enteras como vegetal, transpirando apenas y con procesos fotosintéticos. Ya ni se acuerda del color verde, que en invierno, su estación más activa se torna en una pruina grisácea, con destellos plateados. Eructos, flatulencias y suspiros se prolongan por semanas, la ruta del refrigerador al sofá le toma días. A veces intenta masturbarse, pero termina en un vahído y recuerda que no hay clímax posible, no para él. Ayer, por fin, descubrió que estaba echando raíces, unas muy extrañas, que le brotan de la cabeza, que se dirigen hacia el cielo, como imprecando al Creador, como si quisieran estrangular a tan cruel deidad.

EFECTO MARIPOSA - Rubén Pesquera Roa

O tempora O mores

Se desliza a través del Tiempo, en uno y otro sentido. A veces seduce en un instante a una chiquilla precoz quien no puede explicarse qué pasó, otras tiene tórridos romances con princesas y estrellas de cine. Va de planeta en planeta, se proclama emperador de galaxias enteras y pasa siglos en una escena bucólica, desandando el tiempo.

Se consume en cuestión de segundos, mas también prolonga sus éxtasis hasta el confin del Universo. Provoca guerras, impone la Paz, experimenta con genéticas trascendentales, crea mundos, los destruye.

Peca de soberbia y siente que no sólo lo permea, sino que Él es el Tiempo mismo y que lo ha sometido a Su voluntad. Los rumores se extienden, igual, a través de los tiempos: Dios..., Dios..., ¡ya no es lo que fue!

ERGÓDICO

El fin del tiempo

Los miembros de una secta mística proclamaron que el fluir del tiempo requiere de las memorias que residen en las mentes de los seres vivos. Por eso se internaron en el Desierto de Sonora con la intención de olvidar.

Tras su partida, un número creciente de sucesos inexplicables han sembrado el pánico en la región. Convencidos de que aquel grupo de contemplativos es la causa de tan rojos atardeceres, cientos de voluntarios han emprendido su búsqueda, siguiendo veredas sobre las cuales hoy los pájaros parecen flotar.

Nadie ha regresado.

WOLF -  Gabriel Bevilaqua

A la sombra de un sueño en flor

Pasados los cien años del hechizo, la bella durmiente se resiste otra vez a despertar: «Tarde o temprano, sueña, lo intentará una princesa».

VICO ESCARLATA

Muela del juicio

Te incorporas con un dolor en la quijada, miras el reloj tortuga y la madrugada fluye como caleidoscopio. La punzada te traspasa como un clavo hasta la médula. Tomas Paracetamol, caes sobre la almohada y no hay alivio. Alucinas que amanece muchas veces. La noche termina. Otra vez sueñas que despiertas.

CHESTER TRUMAN

Historia

Hace seis días que me citó por teléfono en éste bar:

— A las ocho en la mesa del fondo, amor mío, llevaré una rosa engarzada en mis cabellos—, dijo, y dije yo:

— A las ocho estaré, mi amor, con un clavel fucsia en la solapa.

Conseguí convencer al dueño del bar para que me dejara pasar las noches en el local.

— Comprenda, señor —le dije con voz lastimera— que tal vez sea el amor de mi vida ¿Y si aparece de madrugada y yo no estoy? Debo esperar aquí: barreré el suelo, recogeré las mesas, fregaré los platos...

Y el hombre accedió. Desde entonces pernocto en el bar History y paso la jornada sentado en la mesa del fondo. Cuando cierran, recojo la sala y me echo a dormir sobre la mesa. Para los clientes, ya formo parte del mobiliario Tan sólo el clavel fucsia marchitado en mi solapa delata mi condición de amante abandonado. Y también el cenicero, siempre desbordado de colillas de Winston. Creo que debería volver a fumar en pipa: es la manera más elegante de tragar humo sin dejar esa imagen desesperada y algo trágica de cigarros a medio apagar, señal inequívoca de que ella ya no vendrá.

EFECTO MARIPOSA - Rubén Pesquera Roa

A tiempo amar y desatarse a tiempo

Los lunes..., los lunes estaba con ella. La pequeñez de su edad promediaba a la perfección con esa edad madura en que la descubrió. A la perfección se amaban. Los lunes el tiempo transcurría a la velocidad de la luz, y cada instante contenía una era geológica.

Los martes regresaba a su esposa, el tiempo se oía transcurrir gota a gota, cada gota aun más eterna que la anterior: aburrida. ¡Y cómo la despreciaba! Ella era la tragedia de su vida, un infierno personal al que los martes estaba condenado.

Los miércoles... ¡Los miércoles! He aquí la desesperanza: los miércoles no aparecen por ningún lado.

ANATRA MARINA - Mónica Ortelli

Tras el vidrio del reloj

Hace tiempo que los encuentros fugaces no conforman a ninguna de las dos. Y encima, el otro rondando…

GATA BLUES

Legítimo derecho

Al fin y al cabo lo tiene bien merecido, lo que no sabemos es qué nos acarreará esta nueva forma suya de actuar, aunque puede que nos venga bien a todos. Al sentir el peso del quehacer diario, como si fuese un jornalero a destajo, el tiempo ha decidido tomarse libre por su cuenta y riesgo el séptimo día de cada semana, igual que el común de los mortales.

Resultado de la Porra 132. Septiembre - 2010