martes, 22 de marzo de 2011

81. Junio - 2006

CONCURSO LXXXI  JUNIO 2006


JURADO: ALBERTO VITAL


TEMA: MARIDO QUERUBÍN-CAZADORES DE CABEZAS


Cazadores de cabezas




Esposo querubín

PRIMER LUGAR


MAMUT


Reducida Fe


— ¡Por Dios, es una cabeza! –exclamé horrorizado cuando el padre Antonio me mostró el contenido del cofre.— Lo sé, Monseñor... una “cabeza reducida”, para ser más exactos. Y créame que eso no es lo más sorprendente...— ¡¿De dónde la sacó?! –le pregunté histérico.— Fue el hermano Rodrigo quien me la trajo –me respondió nerviosamente–. Él estaba realizando su labor evangelizadora en las selvas ecuatorianas, cuando se topó con una de las más antiguas tribus de cazadores de cabezas conocida hasta hoy... ellos la tenían. Ahora, mírela con cuidado.El padre Antonio la cogió entre sus manos y, delicadamente, me la acercó. Entonces, sin saber cómo, los párpados resecos de la cabeza se abrieron y, en una visión que puso a prueba mis creencias y mi entendimiento, se me reveló lo que había dentro de ella: Al principio, vi los Cielos y la Tierra... 

SEGUNDO LUGAR


CHIJAMA


Cocos, cocorotas y cocoteros


En el territorio de los gigantes, cada cierto tiempo atacaban el poblado de los enanos, cortaban unas cuantas cabezas y las traían a su poblado; luego de embalsamarlas, componían collares para sus mujeres o adornos para sus penachos y sonajeros.
Mientras que en la región de los enanos, quienes también contaban con cazadores de cabezas, acudían muy de vez en cuando y en manada, al territorio de los gigantes, se velaban entre el follaje y cuando tenían en la mira a alguno de los colosos, le disparaban dardos soporíferos en un movimiento acorde, para que hiciera efecto en la inmensa mole; después de dormirlo, le seccionaban la cabeza con muchos esfuerzos, mientras algunos de ellos vigilaban que no vinieran otros titanes.


Transportaban la enorme testa hasta su territorio en un armazón de madera, posteriormente la descarnaban dejándola hueca por dentro, la secaban y la purificaban. Aquellos enormes cráneos les servían de viviendas a los diminutos seres. Las esferas de los ojos eran las ventanas y la oquedad de la boca les servía de puerta. Con unos ramajes de ocultación por encima, los jayanes ni siquiera sospechaban que sus cabezas eran moradas perfectas.
Los enanos se jactaban de ser honrados headhunters con provecho, en cambio, decían, los gigantes sólo eran perversos ejecutores que cortaban cabezas para fruslerías.

Resultado de la Porra 81. Junio - 2007






2 comentarios:

  1. Estas dos minis merecen estar bordadas en tapiz.
    Bravo!

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  2. Reducida fe es una de las minis que más me han impresionado.

    El tema, en esta ocasión, me pareció muy de explorar otros universos.

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